jueves, 15 de diciembre de 2016

No puedo atrapar tu corazón con viento. Va de norte a sur y se sienta a mirarme. Es como una cabeza roja escapada de la aorta. Es un fantasma que deambula por vos según sople el aire y hace que tu amor no se ordene. Cuando me pasa cerca y cuando huye como un brillo o como una lagartija, tu amor es un barco a vela que hace que le tema al mar.
Vos, cabeza de foquito, pelo grande, ojos que tenés: dáteme de una vez. Yo, cabeza de foquito, pelo chico, digo no te me des. Yo soy árbol de agua dulce, vos barco de mar. Es lindo que tus tripulantes me vean por el ojo de buey o desde la proa y que yo agite mis hojas y cada tanto nos riamos, en medio de un saludo, cuando pasás por el puerto y yo no estoy dando a beber mi sombra a los ciempiés, a una ciclista voladora, a un tordo de buen comer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario