martes, 30 de mayo de 2017


MURAKAMI ESPIRITUAL

Murakami madruga y escribe cinco horas por día. Se echa una siesta y todas las tardes sale a correr. Lleva así más de treinta años. Siempre intuyó que ejercitarse estimula su creatividad. En "De qué hablo cuando hablo de escribir", pone: "cuando la fuerza disminuye, decae con ella la capacidad de pensar. Se pierde agilidad mental, flexibilidad espiritual. En una ocasión me entrevistó un joven escritor y le dije: <<Un escritor está acabado cuando engorda>>". Yo sé de un cantante evangélico, muy famoso (no supe si leyó a Murakami) que dice que para él correr es un modo de orar. Corre a diario y tiene algunas canciones hermosas.





No hay comentarios:

Publicar un comentario